Palabras pronunciadas por el Lic. Carlos Salinas de Gortari, Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos Se�or Rector de la Universidad Nacional Aut�noma de
M�xico; Aprecio mucho su solidaridad con nuestros compatriotas de Guadalajara. Hoy m�s que nunca resulta indispensable. Es muy grato dirigirme hoy a miembros de la comunidad universitaria con motivo de la informaci�n sobre los avances del Patronato de la Biblioteca de la Facultad de Derecho de nuestra Universidad. Hoy en d�a el papel de los universitarios en el desarrollo del pa�s resulta estrat�gico y de gran responsabilidad. Vivimos momentos de cambio nacional y tambi�n profundos en el �mbito internacional que nos exigen esfuerzo y preparaci�n, en particular, el estudioso del Derecho debe hoy promover, en los hechos, la legalidad, 'la cultura de respeto a la ley y de !a justicia entre nuestros compatriotas. Entre las tradiciones de M�xico la jur�dica es de las m�s ricas, arraigadas v trascendentes; ha sido un hilo conductor que une los distintos episodios de nuestra historia. El pueblo de M�xico tiene una profunda vocaci�n por el Derecho; la vigencia de la legalidad nos ha costado sacrificios, nos da certidumbre y por eso la defendemos. En las aulas de la Escuela de Jurisprudencia, antes, y de la Facultad de Derecho de la UNAM, ahora, han egresado juristas, constructores de instituciones, legisladores y magistrados, dirigentes de la naci�n. A su tradici�n no podemos fallarle. Es mucha la herencia y por eso es mucha la responsabilidad por renovar y superar sus grandes tradiciones. El sistema jur�dico da estructura a la vida p�blica y a la vida social, situado en ella, est� tambi�n, sujeto al cambio que, en parte, su propia din�mica genera. Por eso tiene reglas para su propia transformaci�n y as� cumplir cabalmente con su funci�n social. M�xico est� cambiando para cumplir objetivos que, nuestra historia y la cultura, le han dado en momentos y en circunstancias, radicalmente diferentes, a las de hace tan s�lo unas d�cadas. Estos cambios han necesitado reformas a nuestro derecho positivo comenzando por nuestra Constituci�n. Por eso el Derecho sustenta la transformaci�n pac�fica y concertada de la sociedad; tambi�n es el escucha atento de la comunidad para estar a la altura de los cambios que en ella se gestan. En M�xico fortalecemos, d�a con d�a, nuestro Estado de Derecho. La armon�a entre los mexicanos, su convivencia libre y productiva; la seguridad permanente de cada familia, el ejercicio respetuoso y firme, pero, sobre todo, cercano de la autoridad con el ciudadano son los signos modernos del Estado de Derecho. Estos son los t�rminos en que construimos un pa�s m�s fuerte, internamente y, m�s respetado, por la comunidad internacional. Amigos Universitarios: Debemos entender al abogado como un servidor de la sociedad; su oficio es una de las m�s nobles profesiones, �l es quien por medio de las leyes, a trav�s de su aplicaci�n e interpretaci�n le da a sus conciudadanos el cauce jur�dico en la pol�tica, la econom�a y la convivencia social. Profesores y estudiantes de la ciencia del derecho tienen el compromiso de prepararse con mayor ah�nco y dedicaci�n buscando excelencia y sentido de solidaridad social. Por eso debemos asegurarnos la mayor calidad profesional y human�stica de los estudiantes de derecho, porque es en ellos en quienes se depositar� ma�ana la confianza de los mexicanos su libertad, su patrimonio, sus oportunidades. De ah� la importancia de contar con los medios adecuados a los tiempos que vivimos para la preparaci�n de excepci�n que requieren los abogados en nuestra patria. He escuchado con gran atenci�n sobre los trabajos del Patronato para edificar la nueva Biblioteca de la Facultad de Derecho, que no es otro que el digno espacio para preparar a los grandes abogados del ma�ana y dar, al mismo tiempo, tambi�n espacio de reflexi�n y profundizaci�n de los conocimientos para los grandes abogados de hoy. He escuchado tambi�n la din�mica organizaci�n que han establecido y los fondos obtenidos para hacer realidad este recinto fundamental. Estoy convencido de la necesidad y el compromiso, reafirmado en los hechos, por parte del estado de apoyar a nuestras universidades p�blicas, y en especial a nuestra gran Universidad Nacional Aut�noma de M�xico. Por eso el Gobierno de la Rep�blica ha ratificado su apoyo y recursos reales crecientes a la Universidad, s�lo este a�o dos millones de millones de pesos. Precisamente por la importancia que tiene la preparaci�n en nuestra Universidad y en especial esta Biblioteca de la Facultad de Derecho, en adici�n a estos recursos y en respuesta a lo que aqu� han planteado aquellos que est�n y estamos comprometidos con la calidad en la formaci�n de los estudiantes del derecho y de los que ejercen esta noble responsabilidad, y dado que su Patronato con casi cuatro a�os de trabajo intenso ha alcanzado ya una parte importante para hacer realidad esta construcci�n, el Gobierno de la Rep�blica aporta de inmediato para iniciar ya las obras, tres mil millones de pesos. Haremos realidad esta gran obra. Les propongo que en unos meses m�s nos volvamos a reunir y juntos evaluemos el avance de la propia obra f�sica y tambi�n determinemos la necesidad de los recursos adicionales. Pero tengan la seguridad de que juntos inauguraremos esta Biblioteca. |