Programa de Bibliotecas
Informe (1989-1992)


 Adolfo Rodríguez Gallardo

Dirección General de Bibliotecas

Universidad Nacional Autónoma de México 


José Sarukhán, Rector de esta Universidad:

Miembros del Consejo del Sistema Bibliotecario y del Comité Asesor:

Estimados Colegas:

Señoras y Señores: 

Vamos a presentar a ustedes el seguimiento de las actividades del Programa de Bibliotecas. El cual es el conjunto de acciones definidas dentro de los programas prioritarios del Rector Dr, José Sarukhán. 

La Dirección General de Bibliotecas ha seguido realizando las actividades, que de tiempo atrás tiene encomendadas como son: centralización del control de adquisiciones, procesos técnicos, plantación y desarrollo, y la atención a los usuarios de Biblioteca Central.  

Lo que informamos a ustedes el día de hoy, no son todas las actividades de la Dirección General de Bibliotecas, sino sólo aquellas que están incluidas en las ocho acciones que a continuación detallaré. 

En 1989 el Rector de la Universidad definió una serie de actividades prioritarias para la modernización del sistema bibliotecario y las integró en un programa especial denominado "Programa de Bibliotecas", el cual comprende ocho proyectos, además fue considerado como uno de los programas prioritarios de la Rectoría. A cuatro años de haberse iniciado dicho programa, presentamos a ustedes los avances que se han obtenido en cada uno de ellos y que a nuestro juicio son satisfactorios: 

  1. Incremento en las partidas para la adquisición de material bibliográfico. En estos últimos cuatro años los recursos económicos destinados a todas las bibliotecas del Sistema para la compra de libros, así como también a revistas técnicas y científicas, sin incluir lo correspondiente a la Biblioteca y Hemeroteca Nacionales, creció de manera significativa. El total de lo gastado en este periodo es de 126 mil millones de pesos, lo que representa un gran esfuerzo para la UNAM al dedicar esos recursos para el enriquecimiento de las colecciones. Lo anterior permitió adquirir 973,910 volúmenes de libros, equivalentes a 325,970 títulos. Además se logró mantener la suscripción de 13,000 títulos de publicaciones periódicas, lo cual redunda en un mayor y mejor acceso a la producción bibliográfica tanto nacional como internacional. Con ello ha sido posible mantener actualizado y enriquecido el acervo más grande del país destinado a la educación superior y a la investigación, constituido, por más de cinco millones de piezas documentales.
  2. Generalización de sistemas de estantería abierta. Actualmente el 35% de las bibliotecas de la Universidad, es decir 57 bibliotecas ya están trabajando con esta modalidad, y otras muchas ya recibieron la asesoría correspondiente y sólo están en espera de la colocación de las etiquetas magnéticas o de la terminación de la remodelación de los espacios físicos para ofrecer a sus usuarios la estantería abierta. El hecho de que el usuario tenga acceso directo a la información, significa la optimización del tiempo y ahorro de recursos humanos en la prestación de los servicios bibliotecarios. La afluencia de los usuarios a las bibliotecas del bachillerato, tan sólo por la apertura de las estanterías, aumentó en forma sorprendente, ejemplo de lo anterior son las bibliotecas del Colegio de Ciencias y Humanidades en donde se registró un incremento de 334%.
  3. Control de préstamos con sistemas electrónicos de seguridad. Para una mayor protección y seguridad del material bibliográfico, se entregaron al mismo número de bibliotecas, 30 equipos de seguridad y rampas especiales para el control de los préstamos. Por otro lado se entregaron a 52 bibliotecas 2'003,700 etiquetas magnéticas, lo que representa aproximadamente el 50% del total de los volúmenes existentes en las bibliotecas que abrieron o están por abrir sus acervos. El contar con sistemas electrónicos de seguridad viene a representar una mayor y mejor protección del patrimonio bibliográfico de la Universidad, sin perder el objetivo de una más activa utilización de las colecciones.
  4. Extensión gradual de los horarios de servicio en las bibliotecas. El avance sobre este apartado no fue tan significativo, pero si importante. En la actualidad existen 24 bibliotecas que ofrecen sus servicios el día sábado, y 2 más todo el fin de semana, esto es sábado y domingo, un ejemplo elocuente es esta Biblioteca Central, recinto en el que hoy nos encontramos reunidos para conmemorar los 25 años de la Dirección General de Bibliotecas, en donde la demanda de servicios bibliotecarios en los días sábado, es como cualquier otro día de la semana, es decir, se atiende cada sábado a más de 6,500 usuarios. Los domingos asisten más de 2,000 lectores. Con estas acciones se quiere brindar a la comunidad universitaria las condiciones para que pueda llevar a cabo sus actividades académicas en forma ininterrumpida.
  5. Adecuación de espacios físicos. Dados los altísimos recursos que demanda este proyecto, sólo se pudieron construir 3 nuevos edificios para biblioteca: el del Instituto de Física, la Escuela Nacional de Enfermería y Obstetricia, y la Facultad de Odontología. Por otro lado, se realizaron remodelaciones y ampliaciones de los locales de 12 bibliotecas: en la Escuela Nacional Preparatoria Plantel 1, en los 5 planteles del Colegio de Ciencias y Humanidades, en la Facultad de Psicología, en la Escuela Nacional de Estudios Profesionales. Zaragoza, en la Facultad de Estudios Superiores Cuautitlán, entre otras. Además gracias al apoyo del Gobierno Federal se encuentran en proceso de construcción, las bibliotecas de las facultades de Ciencias, Derecho y Economía, así como también para el Instituto de Investigaciones en Materiales. A falta de espacio adecuados para el estudio en casa, la biblioteca universitaria se ha transformado en el lugar ideal para invitar a los usuarios a permanecer más tiempo en ella y llevar a cabo sus actividades académicas, mucho es lo que falta por hacer en esta área, pero lo realizado da muestra clara del interés de mejorar las instalaciones en que se prestan los servicios bibliotecarios.
  6. Capacitación para el personal bibliotecario. Los apoyos a este proyecto fueron verdaderamente satisfactorios y por consiguiente sus resultados, de tal forma que se impartieron 31 cursos de actualización, en los que participaron 460 académicos; en lo que corresponde a los cursos de capacitación, se llevaron a efecto 82, en los que participaron 1,149 administrativos, con la colaboración de la Coordinación de Asuntos Laborales. Como apoyo adicional a la entrega de los equipos de cómputo, la Dirección General de Bibliotecas impartió 42 talleres de instrucción en la consulta y utilización de los bancos de datos LIBRUNAM SERIUNAM y TESIUNAM así como también en la utilización del programa CIRCULA. En este sentido se contó con la participación acreditada de 369 bibliotecarios y se vieron beneficiadas las 164 bibliotecas que integran el Sistema. Podemos decir que nunca antes se había realizado un esfuerzo tan serio y generalizado de capacitación, pues casi en su totalidad el personal con categoría de bibliotecario tomó los cinco cursos que en su conjunto cubren más de 160 horas de capacitación.
  7. Orientación de usuarios sobre los servicios que prestan las bibliotecas de la UNAM. La primera etapa de este proyecto se llevó a cabo durante el ciclo escolar 1992, el cual consistió en proyectar y entregar, a los 45,000 alumnos de nuevo ingreso al bachillerato, correspondientes a los nueve planteles de la Escuela Nacional Preparatoria y los cinco planteles del Colegio de Ciencias y Humanidades, dos videos y 90,000 folletos respectivamente. La segunda etapa correspondiente al ciclo escolar 1993, que a la fecha se está llevando a cabo, consiste en proyectar y entregar a los 75,000 alumnos de nuevo ingreso a la Universidad (45,000 alumnos del bachillerato y 30,000 de licenciatura), la nueva versión de los dos videos, así como también la entrega de 80,000 ejemplares de la nueva edición de los folletos. Como resultado de esta modalidad de orientación a usuarios en el uso de los servicios bibliotecarios, el aprovechamiento de los mismos se ha visto incrementado en una forma por demás considerable, y como ejemplo en las bibliotecas del bachillerato se detectó un 126% de incremento en la asistencia, a partir de la utilización de estos videos.
  8. Apoyo de cómputo en las bibliotecas. Se dotó a 130 bibliotecas con equipos de cómputo, consistente en: procesador XT con disco duro, impresora de 11", lector de disco óptico, banco de datos LIBRUNAM en CD-ROM, modem para acceso en línea a los bancos de datos, el programa CIRCULA. Aunado a todo lo anterior se está entregando a 21 bibliotecas de escuelas, facultades y Biblioteca Central, 160 computadoras PC para automatizar los catálogos al público y el servicio de préstamo, permitiendo con ello un mejor control en el préstamo y devolución del material bibliográfico. Todo este esfuerzo de automatización de las bibliotecas y gracias a las telecomunicaciones, permitirá conectarse a la Red de Cómputo de la Universidad. Además, a través de los sistemas de disco óptico, se permite a todas las bibliotecas de escuelas y facultades, tener acceso a las bases de datos de la Dirección General de Bibliotecas. Estas bases de datos son: LIBRUNAM que contiene todos los títulos de los libros existentes en las bibliotecas de la Universidad. En su tercera versión en CD-ROM está formada por cerca de 500,000 registros. En el caso de la base de datos SERIUNAM, en su primera versión en CD-ROM cuenta con la información de 29,000 títulos de publicaciones periódicas, así como la ubicación de 2'500,000 fascículos en las 164 bibliotecas de la UNAM y en 56 bibliotecas de 12 instituciones de educación superior. Es importante señalar que la producción de estas dos bases de datos en CD-ROM, se ha realizado de manera interna. En el caso de TESIUNAM en la actualidad cuenta con un total de 185,000 registros, principalmente de las tesis de la UNAM, así como también de algunas de las instituciones más importantes de educación superior del país. Gracias a la automatización de varias de las actividades en las bibliotecas del bachillerato, se realizan alrededor de 12,073 préstamos a domicilio diariamente.

El día de hoy inauguramos los catálogos automatizados de la Biblioteca Central, de la Facultad de Veterinaria, y los de Contaduría y Administración. Del día de hoy al 14 de diciembre del año en curso, intentamos concluir con las instalación de estos catálogos en las bibliotecas de estudios profesionales de todas las escuelas y facultades de la UNAM. 

La instalación de los catálogos automatizados en las bibliotecas de la UNAM representa un paso de primera importancia dentro del proceso de modernización de nuestros servicios bibliotecarios. Con la posibilidad de que los usuarios accedan directamente a los equipos, se abre una nueva era en la historia de las bibliotecas de la UNAM. 

Mediante esta forma de consulta el usuario tiene acceso al catálogo actualizado de su biblioteca, ya que el mantenimiento se llevará a cabo con mayor frecuencia, dependiendo del volumen de adquisición que se presente. 

El usuario tiene posibilidad de búsqueda de información con mucha mayor precisión, ya que existe una enorme flexibilidad en las formas como puede recuperarla. Además el usuario dispone de varias opciones para establecer sus estrategias de búsqueda de la información. 

El tiempo que el usuario dedica a la consulta de los catálogos se reduce en forma notable, ya que indudablemente el proceso automatizado es mucho más rápido que el manual. 

Todo el proceso de selección de equipos y desarrollo de programas, contó con el franco apoyo de la Dirección General de Cómputo para la Administración, la Dirección General de Cómputo Académico y el Comité de Cómputo de esta Universidad.

 Un aspecto importante que no puede ser pasado por alto es la aprobación, en 1990, del Reglamento General del Sistema Bibliotecario de la UNAM, ya que prevee un marco legal para las futuras actividades bibliotecarias en la Universidad, Sin embargo lo más importante que presenta el Reglamento, es la instalación del Consejo del Sistema Bibliotecario y del Comité Asesor del Consejo del Sistema Bibliotecario. El Consejo es el cuerpo colegiado del más alto nivel, el cual es presidido por el Rector, cuya función principal es supervisar el adecuado funcionamiento y desarrollo del Sistema; reviste gran importancia ya que significa la participación de todos los sectores de la Universidad, autoridades de la administración central, profesores, investigadores, bibliotecarios y estudiantes; prevaleciendo ante todo la representatividad y actividad académica. Equiparable importancia tiene el Comité Asesor cuerpo colegiado integrado por todas las instancias sobre el área de la bibliotecología y de información de la Universidad, que tiene como función dictaminar sobre todos los asuntos que le turne el Consejo. Asimismo la Dirección General de Bibliotecas es el órgano ejecutor que se encarga de coordinar el funcionamiento del Sistema Bibliotecario. 

Las condiciones dentro del sistema bibliotecario universitario más grande del país, como es el de la Universidad Nacional Autónoma de México, se han mejorado, ya que se cuenta con la infraestructura necesaria para aprovechar al máximo los recursos documentales, representando con ello el apoyo académico en las tareas de docencia, investigación y difusión de la cultura. 

A cuatro años de la puesta en marcha del Programa de Bibliotecas, podemos valorar los logros de este esfuerzo en materia de bibliotecas y estar satisfechos con ellos, los resultados se comienzan a manifestar en una mayor afluencia de usuarios a las bibliotecas, y mejores servicios. Esto es una muestra de que los esfuerzos realizados por la Universidad a través de la Dirección General de Bibliotecas, están rindiendo frutos. No obstante lo anterior, estamos convencidos que el reto para el futuro será mayor. Todo esto ha sido posible gracias al esfuerzo del personal académico y administrativo, tanto de la Dirección General de Bibliotecas como de las bibliotecas de las escuelas, facultades, centros e institutos, A ellos, queda el compromiso de mejorar los servicios bibliotecarios y velar por que cada día podamos incrementarlos, en número y en calidad.

Para concluir permítanme citar un párrafo del Dr. José Sarukhán Rector de esta Universidad e impulsor del Programa de Bibliotecas, con el que concluyó su informe de actividades de 1991, "Mi mensaje, universitarios, no es de triunfalismo; los académicos no triunfamos nunca, sólo avanzamos. El alcanzar una meta para el académico supone encontrar nuevas interrogantes para trazar así nuevas metas... y otra vez, nuevas interrogantes en la búsqueda de la verdad. En eso consiste nuestro trabajo, nuestro camino y, en general, nuestra vida".

Por su atención, muchas gracias, 13 de noviembre de 1992.